Un refrán señala sabiduría dentro de la esencia de la cultura y tradición de un país. Y que acertado resulta en este caso, una frase corta que encierra un todo a la hora de transmitir de alguna manera enseñanzas y valores.
Ya entrados en gastos, este refrán lo que busca es señalar el camino optimista de lo que es nuestra realidad actual. Este camino difícil y tortuoso el cual nadie esperaba, tal vez para la gran mayoría una mala pasada, deja en el fondo lineamientos favorables incalculables. Todo depende de donde lo mires.
El malestar psicológico, la ansiedad, el forzado encierro, el constante estrés por la crisis económica, el gran temor de adquirir contagio acompañado de la incertidumbre de su evolución ), el distanciamiento, la sobrecarga emocional aún más estricta en el personal de la salud, que todo en un golpe refleja cambios en la vida cotidiana.(no solo física, Covid puede llegar al cerebro y estar latente, las secuelas, los síndromes neurológicos y psiquiátricos, monitoreos además de tratamientos entre otros
A este último ítem que agrupa todo, me quiero referir. ¿Para cuantos, el trabajo fuera de casa o las obligaciones derivadas de ello, era la excusa perfecta para no compartir obligaciones morales, sentimentales, físicas y psicológicas dentro de su núcleo familiar ?, muy seguramente para un gran porcentaje. Esta situación se debe aprovechar para tener un real contacto con padres, hermanos, hijos, esposa y el entorno estable (lo que no cambia en la vida). En estos espacios se generan el reconocimiento (verbo transitivo) de la cercanía, del apoyo, del sustento, del cariño, del conocimiento personal; de valorar el trabajo aún más dentro de hogar, al darme la oportunidad de aprovechar de manera óptima el tiempo (no serecupera cuando se pierde, no gasté horas esperando llegar a mi lugar de trabajo o llegar a casa en la eterna movilidad y transporte de la ciudad llena de sorpresas en su mayoría poco agradables – inseguridad entre otras -), el espacio con sus bondades ( la alimentación sana…) y que aun en casa reconozcan de manera cercana, objetiva, directa, esfuerzos y obligaciones hacia la familia cuando se asumen las responsabilidades y retos que resultan de abordar las actividades propias de la labor.
Amo el trabajo, amo el servicio, en casa trabajo más, pero lo hago mejor al tener a mi alcance y control lo que compone en esencia la vida (mi familia / mi trabajo cumplido a cabalidad), sin distracciones superficiales o pasajeras que en muchas ocasiones arrepentimientos trae. En alguna ocasión llegué a pensar que no me conocían en casa. Fuera en muchas ocasiones existen distractores que de alguna manera pueden nublar la esencia de una vida familiar que al perderla es irrecuperable. Cuidado…no quiero por ningún motivo bajar de nivel las relaciones interpersonales y con el entorno fuera de la familia…pues el contacto social e interpersonal son punto básico en el desarrollo y la cultura del ser humano, todo es complementario…solo que en la vida existen prioridades las cuales de una manera real son las únicas que nos llevarán ser excelentes padres, hijos, pareja y sobre todo profesionales entregados a nobles causas de servicio pertenecientes a la Empresa que representamos.
Este pequeño blog, se situó en ese gran refrán…solo eso.
Martin Angarita
Md. Esp. S.O
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